El JABÓN SANGRE DE DRAGO es una opción excelente para el cuidado de pieles dañadas y agrietadas. Este producto se destaca por sus propiedades regeneradoras, que son potenciada gracias a la presencia de sangre de drago. Esta resina natural, conocida por sus notables cualidades cicatrizantes, contribuye significativamente a la reparación de la piel, promoviendo su regeneración y reduciendo la apariencia de las cicatrices. Además de sus beneficios regeneradores, el jabón contiene aceite de citronela, que añade una capa adicional de protección. La citronela es conocida por sus propiedades antisépticas, ayudando a prevenir la proliferación de gérmenes, hongos y otros microorganismos que pueden comprometer la salud de la piel. La combinación de estos ingredientes no solo limpia la piel de manera efectiva sino que también proporciona una barrera protectora que ayuda a mantener la piel libre de infecciones. El JABÓN SANGRE DE DRAGO es ideal para aquellos que buscan una solución para restaurar y proteger la piel, especialmente en casos de daños severos o sequedad extrema. Su formulación única ofrece una limpieza profunda mientras contribuye a la salud general de la piel, haciendo de este producto una herramienta valiosa en el cuidado diario.
CONTRAINDICACIONES Y/O ADVERTENCIAS
La información aquí proporcionada no tiene la intención de diagnosticar o tratar enfermedades y no ha sido evaluada con ese propósito. Se presenta únicamente como una guía general sobre el producto. Es crucial seguir las indicaciones y contraindicaciones del envase para un consumo adecuado y evitar posibles efectos adversos. Antes de consumir este producto, se recomienda consultar a un profesional médico, especialmente si tienes condiciones médicas preexistentes, estás tomando otros medicamentos o tienes preocupaciones específicas sobre su uso. No consumir este producto durante el embarazo o la lactancia, a menos que lo autorice un profesional de la salud. Mantener fuera del alcance de los niños y las mascotas. No exceder la dosis recomendada a menos que lo indique un médico. Ante cualquier reacción adversa, suspender su uso y consultar a un médico.
